Las bodegas de la Denominación de Origen Binissalem, repartidas por los municipios que conforman la comarca, son bodegas pequeñas y medianas de tradición familiar, que han invertido en tecnología, en personal y en formación y que, han apostado por las variedades de uva locales, elaborando vinos singulares con un alto nivel de calidad, avalado por los reconocimientos, tanto a nivel nacional como internacional.
El enoturismo es una actividad turística con una demanda creciente y es una oportunidad única para dar a conocer los vinos y fidelizar a los clientes. Por este motivo, las bodegas ofrecen propuestas diversas y atractivas que no dejan indiferente, al visitante.